ANALITYCS

domingo, 21 de abril de 2013

SEGURIDAD EN UNO MISMO

Algunas personas que acuden a la consulta manifiestan ansiedad porque dicen sentirse inseguras: bien sea en sus relaciones personales, en el trabajo... tanto en su manera de comportarse como en los pensamientos acerca de los acontecimientos diarios que les toca enfrentar.
Esta inseguridad, que se traduce en una permanente duda acerca de sí mismos y de su valía general como persona, genera mucho sufrimiento, porque supone estar permanentemente poniéndose en duda, descalificándose, rebajándose y analizando pormenorizadamente su comportamiento... pero siempre para mal.
Cuando nos sentimos inseguros, asumimos equivocadamente que nuestro valor como persona en tal o cual aspecto está condicionado por el criterio externo, es decir, que depende a veces de la aprobación de los demás o de determinada situación que creemos nos pone a prueba. Inmediatamente, cuando pensamos así, dudamos de nuestra capacidad y buen criterio, y nos dejamos arrastrar por la incertidumbre, lo que a su vez nos genera una gran inseguridad. De esta manera, nos metemos en un círculo vicioso negativo: dudamos de nuestras capacidades, valoramos más la opinión ajena, creemos que estamos siempre sometidos a ese examen externo que nos exige capacidades y cualidades que nosotros quizás no tengamos o que debamos demostrar caiga quien caiga, con lo cual nos generamos una ansiedad y una inseguridad que nos devuelve otra vez al comienzo del círculo, quedándonos atrapados mentalmente en un bucle sin final que solamente genera sufrimiento.
Una de las primeras cosas necesarias para salir de ese espacio cerrado y conseguir ser una persona segura es confiar en nosotros mismos afrontando aquellas situaciones negativas o críticas, pero valorando nuestro criterio y poniendo adecuadamente los límites en nuestras relaciones personales.
Además, debemos desdramatizar continuamente, dada la tendencia que tenemos los seres humanos a pensar con frecuencia que todo “es el fin del mundo”, en relación a situaciones o comportamientos que no revisten esa gravedad.
Deberemos también controlar nuestros pensamientos para que mediante la práctica consigamos alejar de nuestra mente aquéllos que nos comparan, que nos hablan de nuestros defectos y que nos dicen que hemos hecho el ridículo o que qué pensaran de nosotros. Para esto es un aliado importante el sentido del humor, ya que minimiza inmediatamente esos pensamientos tan negativos, y ayuda a que pensemos de una manera más racional y positiva.
Tendremos que saber vivir con una actitud optimista, aceptando la incertidumbre de la vida hacia el futuro, pensando que las cosas saldrán bien y que, en el caso de que no sea así, si nos sentimos serenos, confiados en nosotros mismos y con bienestar interno, podremos afrontarlas mejor.

www.diazbada.com


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...